Ponerse de acuerdo en asuntos de interés colectivo requiere establecer una comunicación clara y efectiva.

Estar dispuestos a dialogar es el primer paso para cualquier entendimiento y acción conjunta. Cuando analizamos con detenimiento los conflictos sociales, incluso los de nuestra vida cotidiana, nos damos cuenta de que pueden derivar de dificultades en la comunicación.

Por medio del diálogo es posible conocer y reconocer las ideas de los demás, saber que no siempre pensamos igual ni estamos de acuerdo.

Para vivir todos juntos es preciso reconocer las diferencias y aceptar a os demás como son, ése es el principio de la tolerancia, un valor fundamental en la convivencia democrática.